El progreso

      ¿Qué es el progreso y cómo lo podemos medir? Es imposible cuantificar el progreso que tenemos en los entrenamientos pues se trata de algo relativo en cuanto a la persona, la situación y el medio que utilicemos para medirlo.
Se entiende como progreso el avance hacia algo mejor. Claro que, si nos ponemos una meta muy concreta y más nos acerquemos a ella, está claro que avanzamos positivamente hacia dicho objetivo. Pero en el caso de no tener una línea que poder establecer para tomar referencias surgen distintas vías de prosperar.

• Tiempo. Hacer el mismo volumen de entrenamiento en menos tiempo, ya sea por hacerlo más rápido o por disminuir los descansos.
• Volumen. Meter más series o repeticiones.
• Calidad. Mejorar la técnica.
• Peso. Mismos ejercicios aumentando la carga.
• Sensación de fatiga. Sentirnos menos cansados al terminar.
• Actitud. Empezar a tener ganas por las cosas, o tener más.
• Frecuencia. Aumentando los días de entrenamiento a la semana.

Por lo tanto, ¡Hay muchas formas de mejorar! Y todas ellas cuentan. Habrá días que el tiempo no te cuadre, pero sin embargo terminarás más contento o menos cansado.